"Tomaré su alma y una vez que lo haga terminare contigo."

"Lord Voldemort es mi presente, pasado y futuro"

Fueron parte de las últimas palabras que aquel espíritu del diario dijo mientras el diario era atravesado por aquel afilado diente venenoso que había sido enterrado en el brazo de un joven Harry Potter.

Un grito desgarrador inundo el lugar y antes de verlo desaparecer Harry puso su atención a la figura de la pequeña pelirroja que había despertado de pronto tras recuperar la conciencia.

"Lo siento Harry no quería, el me obligo."

"Esta bien Ginny todo termino debemos irnos."

Mientras ambos salían a buscar a Ron y a Lockhart no notaron la sombra que aún flotaba sobre el lugar, ni que esta salía tras ellos para desaparecer en dirección desconocida.

Años después Lord Voldemort ya resucitado era destruido por un Harry Potter dispuesto a dar su vida por los demás. Mientras se desvanecía escucho un murmullo. "No ha terminado, la muerte no es el final, aún existe una forma de volver."

El horrocrux de aquel diario habia logrado escapar antes de ser destruido por completo, ahora residiendo en una mansión abandonada en lo que hace muchos años se conocía como La Mansión Riddle una serie de paranormales sucesos están ocurriendo. Varios investigadores paranormales fueron reclutados sin poder expulsar a tal ser.

Ahora dos más van de camino Alexander Kane y Gabriel Castle junto con su equipo se dirigen al lugar. Y es aquí, donde inicia nuestra investigación de la noche.

¿Si hola? Llama a la línea de contacto extranormal. ¿Cómo podemos ayudarle? -Gabriel había tomado el teléfono por la mañana cuando sonase en un modo altamente insistente. Usualmente tenían a un encargado de filtrar las llamadas, mismo que por el momento se encontraba indispuesto tras haber comido algo malo generando un malestar estomacal fuerte y ser enviado al médico. No le molestaba porque era cuando a veces le tocaba atender las solicitudes más inusuales del mundo, esta por su instinto le decía que sería una de esa categoría, ya habia tomado otras que parecían más una broma que algo realmente serio, más las había anotado solo por si acaso.

La persona al otro lado de la línea se escuchaba bastante alterada y hablando por lo bajo como si hubiera un temor de ser encontrada. Tuvo que poner toda su atención para no perder importantes detalles acerca de lo ocurrido haciendo una que otra pertinente pregunta al respecto, lo cuál siempre era protocolo, de lo contrario ni siquiera podría saber por donde  iniciar la investigación...si es que terminaban tomando el caso.

No solo por saber a que iban a enfrentarse, era su productor a la vez aquel encargado de autorizar o denegar las investigaciones de acuerdo a distancia, viáticos y agenda pues constatemente tenían grabaciones programadas.

Colgando lo primero que hizo fue ir en busca de su compañero de investigaciones, Alexander, quien podría estar en la sala audiovisual revisando el material de la investigación más reciente.

¿Alexander estás libre? Pregunto asomando su cabeza al ver el video de un caso reciente corriendo y a este con los audífonos puestos, a veces era para ver si podian detectar psicofonías que el oído humano no estaba entrenado para registrar. Tomando asiento decidió esperarlo a que tomará en cuenta su presencia, ambos siendo un equipo siempre iban a decidir juntos y luego preguntar al productor, ya en otras ocasiones incluso les había tocado asistir a alguna investigación por separado solo acompañados por los camarógrafos.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

No supo qué horas eran, podía ser hora del almuerzo o de la merienda, para Alexander era lo mismo cuando se trataba de trabajo. Muchos de sus amigos, los que le quedaban al menos, se quejaban de sus trabajos tras su egreso. Él, por el contrario, estaba feliz de poder dedicarse al cien por ciento a esto y que le generara ganancias como para vivir bien.

Ahora tenía una grabación entre manos, evidentemente era un fantasma de los tímidos porque desde que entraron a la casa dejó de manifestarse, como quien trata de pasar desapercibido, aunque las pruebas indicaban lo contrario. Se trataba de una señora mayor, por lo general esos fantasmas eran calmados y poco reactivos. Esperaba poder oirla al menos en parte de las grabaciones. Siendo la tercera vez que volvía a escuchar a detalle la misma, terminó pausándola. Retrocedió y oyó como una anciana susurraba una canción antigua, buscó información al respecto descubriendo que era un tema austriaco y tenía sentido, ya que la antigua dueña de la casa era centroeuropea.
Repasó la grabación una vez más, ensimismado, sin notar la presencia de Gabriel en la sala. Creyó oír un sonido y la pausó para revisarlo, fue allí cuando su mirada se fue de lado.

El sobresalto al ver que tenía a alguien esperándolo fue tanto que casi rompe la conexión con los auriculares.
- ¡Puta madre, Gabriel! - soltó retomando el aire y quitándoselos - Ay, por Merlín, no te escuché entrar… encima la vieja me canta en susurros temas de lo más creepys - su corazón latía con fuerza, se sostuvo el pecho por un momento y terminó por soltar una sonrisa - Además... te despertaste bien feo hoy - chequeó a su compañero de arriba a abajo - A ver… ¿Qué pasó? - consultó notando que éste no lo solía interrumpir por idioteces como ir por comida.
- ¡Ya son casi las 10 de la mañana y no desayuné! - soltó sorprendido al chequear el reloj tras su asiento. Ahora tenía más en qué pensar. Cortó la grabación para parar su trabajo. Era momento del descanso.

Alexander Kane|| Cuartel Gral.|| Por la mañana

No, nada de nada, parecía que estaba totalmente muerto para el mundo entero, por mucho que lo llamaba el otro no le miraba ni un poquito, y bueno era mejor dejarlo por la paz hasta que notara que estaba acompañado, para esa hora ya hasta lo estaría asustando, algo que pasaba continumente si no hacía el más mínimo ruido al respecto.

No era un trabajo común pero cuando se cuenta con ciertos dones especiales para poder ver el más allá o contactar con los que están en un plano más allá, bueno lo que queda es intentar darles esa luz, lo cuál no siempre se puede si se trata de personas con un gran resentimiento o maldad que no quiere ser erradicada.  Si bien no era el más experimentado, era claro que mientras más edad tuviera mejor su habilidad, es decir los anteriores maestros eran toda una eminencia de casos severos. Y su instinto le decía que este nuevo caso podia ser algo complicado pero todo un reto para encontrarse a si mismo también.

Solto una tremenda carcajada al verlo saltando mucho más rápido que un conejo en celo. -No me culpes, estabas tan concentrado que por más que te he llamado nada que me hacías caso. Así que este susto ha valido los minutos que he mirado tu cara de constipado. Trató de calmarse pero le fue completamente imposible. Deja a la pobre mujer, seguramente te canta temas de amor para que mueras por ella. Riendo completamente de esa broma. ¡Es una mentira! ¡Hoy si me he bañado! Que claro que lo hacía constantemente, no le gustaba ir como un indigente apestando a sudor ácido.

Bien, te preguntas que pasa, y lo que pasa es que no se que pasa, solo tengo la llamada de una mujer al borde de la neurosis exclamando que una de las casas del pueblo que uff es de hace siglos esta embrujada y parece que nada de lo que intentan ha logrado botar a lo que sea que habíta ahí.

Le dio un golpe en la cabeza al escucharlo pensar en comer. Vamos a que comas  y te sigo contando por el camino, no parece un caso de lo normal, bueno más normal de lo que es lo anormal.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

Se quedó mirándolo fijo por una eternidad, o eso le pareció a él. Sentía corazón golpeteando a mil en el pecho, su respiración agitada se podía notar apenas porque respiraba con los labios entreabiertos y al cabo de unos segundos parpadeó sin mutar su rostro de póker - Constipado va a quedarte el culo, Gabriel - soltó lento y con malicia como quien maldice al otro. Le quitó la vista y acomodó los auriculares correctamente mientras volvía en sí.
Negó rotundamente con la cabeza - No, no es así, esa vieja intenta convencerme que es de las viejitas buenas, pero tu y yo sabemos de lo que es capaz cuando le das la mano - señaló con el índice hacia arriba terminando de acomodar las cintas para tener todo listo y acomodado antes de pasar al desayuno, según su propia abuelita, la comida más importante del día.

- Lamento decirte que el baño no te quitó lo feo - comentó seco, conteniendo así la risotada que quería escapar. Por el contrario, conocía demasiado a Gabriel como para creérselo, era un Don Juan, si lo miraba por mucho tiempo terminaba por darle una erección, así que prefería evitar mirarlo por demasiado tiempo, no sea cosa que terminara gustándole.

Asintió oyendo lo que tenía para comentarle ahora que tenía su total atención - Ok, muy claro de tu parte… - interrumpió al comienzo en tono sarcástico - Ya veo… seguro se le pegó un jinn - se animó a especular con el motivo de tal llamada, muchas veces se podían poner violentos y los ataques, si bien eran breves, podrían causar gran impresión en gente que no estaba acostumbrada a lidiar con algo semejante. Todo pensamiento siempre se interrumpió al notar que su estómago estaba vacío, de seguro repitió el tema de la comida en medio de la charla por lo que se ganó un golpe en la cabeza.
- Si me llego a quedar sordo por los golpes terminarás siendo el único aquí, piénsalo… - le reprochó como quien amenaza - Si, mejor me cuentas de camino al local - se levantó animado de la silla.

Ya en camino - ¿No es normal?¿Por qué lo planteas? Por lo general la gente se asusta de todo. De una luz que se prende sola, de un gato mirando un punto en el techo, de el viento que mece la hamaca ¿Por qué crees que esto es distinto? - cuestionó mientras avanzaban por la vereda con sus manos en los bolsillos y la capucha cubriéndole la cabeza, resistiendo de esa forma al sol que lo amenazaba.

Alexander Kane || Cuartel General || Por la mañana

Le devolvió la mirada y se vieron fijamente y solo faltaba que todo pasará como en las novelas se romance donde uno de ellos se acerca y luego se besuquen con mucha pasión.

En el cado de ellos dos eso no paso para nada solo Alexander con sus comentarios de siempre. Ya quisieras poder llegar a ver tal sabrosura Alexander. Le señalo con el dedo en forma "amenazadora".

Claro, me diras que la viejita es tan malvada como la vecina que dices que te acosa cada que te mira e insiste en que solo vayas con ella por una tacita de café mientras se la niegas todas las mañanas. Y la verdad sentia una poca de hambre lo que más tenía era ansiedad por ese nuevo caso mismo que de verdad sonaba muy extraño.

Solo envidias este buen cuerpo que tiene un redondito trasero y facciones talladad por los mismos dioses. Mostrando su lengua infantilmente, la verdad Gabriel le tiraba piropos y los coqueteos a medio mundo, y con Alexander más por solo joderlo, ni los fantasmas se quedaban excentos.

Tomó un papel medio descartado de la mess y lo dobló hasta formar una pelota con este que le terminó lanzando a la cara por tonto.No he llegado a las mejores partes aún, eres un bestia conmigo. Pero a eso ibs y continuó su interesante relato.

No creo que sea eso, la mujer parecía tan desesperada que nos ofreció pagar el viaje entero del equipo por librarnos del problema. Nadie hace eso ahora.

Para soltar un viaje solo porque algo paranormal pasaba era peor, ellos solo iban a donde les permitía el puesto de producción, no más allá o esos gastos ya corrían de parte de cada quien.

Bah sordo, mejor ni dañar tus pocos buenos atributos, sordo estas cuando ni pillas que llegó por más que te llamó en la próxima te voy a tocar una corneta.

Pero bueno caminando le iba contando el resto. Como te decía afirma que ese lugar lleva siglos abandonado y que la familia que vivía ahí sufrió muchas desgracias de pronto. Ya han llamado a otros como nosotros y nadie se puede librar de lo que sea que esta ahí, el poco pueblo ya mejor quiere irse, dicen que cada vez que pasan se siente como un aura de muerte y mi instinto cree que no es como las investigaciones de siempre. Saco el arrugado papel y se lo dio. Son los detalles y puedes examinar la llamada, verás que no te miento con su terror al hablar.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

Muchas veces había perdido en esas batallas de miradas frías entre ellos, minutos que pasaban y terminaba por descoserse de risa solo. Pero no, intentaba mejorar día a día y, si bien se le dibujó una mueca extraña en la boca ante la respuesta de su pareja, terminó respondiendo - Ya la he visto, Gabriel. Y eso está lejos de ser una sabrosura. Deberías ponerle aunque sea el mínimo de investigación que pones en el trabajo en chequear bien esa información - acto seguido, abrazó el dedo amenazante de su amigo con la mano y tirando hacia arriba sopló como si se tratara de una flatulencia.

Hizo un gesto de dolor al ver que le reprochaba lo de la tacita de café con la vecina - ¿Tu irías? Sinceramente ¿tú irías a la casa de esa señora con el olor a pis de gato que tienen esos cojines? - y esperó su respuesta, como si realmente pudiera siquiera tomar una taza de café en un ambiente así de sofocante - ¡Olvídalo! Amo a los gatos pero la higiene es importante. Estoy casi seguro que Homero murió por los malos olores - comentó refiriéndose al último gato muerto en esa casa.

Terminó por levantarse, era hora de ir por ese desayuno antes de desfallecer - Si, si, sigue repitiéndolo y quizá te lo creas… - dijo para quitarle la mirada una vez que le sacó la lengua, entreteniéndose en apagar el equipo. Cuando le quitó importancia a su relato, recibió un golpe de hoja en forma de pelota. Lo miró sombrío y abrió el papel, notando que era una anotación que había descartado en el tacho, sino tendría un buen motivo para desquitarse en puteadas con Gabriel - Te trato así porque es mi forma de demostrar amor - soltó sin darle importancia tras volver a aplastar el papel en la forma de bolita y regresarlo - ¿Viáticos gratis, dices? ¡Me apunto! Debe ser algo importante… - confirmó las especulaciones del otro.

Quedarse sordo era uno de los miedos encubiertos que tenía para la adultez - ¿Corneta? No ¿Por qué mejor no me tocas esta flauta? - soltó mientras llevaba levemente la cadera hacia adelante y sonreía por sus ocurrencias. Eran terribles en la escuela y la seriedad evidentemente no era su punto fuerte, sin embargo, cuando se trataba de trabajo sacaban lo mejor de sí mismos.

Tras esto, salieron a buscar café y comida para ambos mientras Gabriel le contaba los pormenores - Suena demasiado bueno para ser verdad, me encanta ¿Cuándo podemos ir? ¿Tenemos libre esta semana? Puedo adelantar los otros casos si me quedo hoy y soy un elfo libre - comentó entusiasmado. La simple idea de ganar donde los otros no pudieron se le hacía tentadora.

Alexander Kane || Cuartel General || Por la mañana

Esas guerras de miradas eran kuy legendarias y no sería este quien la desviara primero, no ssñor cuando era altamente importante mantener su punto contra Alenxander porque ambos podían ser bastante necios en ese sentido así que ni caso que tratara de distraerlo, a pesar de que ahora el otro pudiera aguantarla un poco más, perdiendo aparatosamente y sintiendo el triunfo cuando este no se pudo mantener callado por más tiempo.

Sabes que pongo el debido cuidado en ambas cosas. ¿Son celos lo que detecto de que tus encantos no funcionaron en el caso pasado? Por que había sido algo patético como la clienta no se puso como colegiala con los elogios dd Alexander.

Obviamente no iría, me daría una alergía al primer respiro, teorizo que esta mujer ya ni tiene sentido del olfato por la peste o esta a un paso de la tumba y ya por eso no le importa. Y eso que más de una vez le habían llegado quejas de varias personas por la peste, en especial en tiempos de calor.

Seguro que fue eso o el exceso se vigorizante ejercicio con todas las gatas de la casa si sus maullidos eran la señal. Por eso estaba llena de ellos esa casa, los gatos realmente no se contenían.


Le devolvió el gesto con la lengua asi de infantiles eran totalmente, y si tenía algo de hambre que iba a negar eso si le lograba sacar un desayuno al otro.

Ya claro amor, creo que solo me maltratas para compensar algo. Dijo entre risas  aunque no fuera así. Solo quería molestar y era así como ambos se llevaban.

La desesperación de una persona puede hacer tantas cosas, se oye sospechoso pero igual tenemos que pedir los permisos de ese viaje.

Había muchas cosas que temer pero bueno era mejor irlas aceptando por ahora. Hahahah, seguro campeón eso no llega a mucho pero luego te la toco no se vaya a secar si no le dan amor. Respondió y bueno si eran completamente terribles.

Ya con la comida en mano tomaba su café mientras el otro continuaba leyendo y hablando, Gabriel estaba completamente pensativo.

No tenemos casos esta semana que tenga en la mente o que esten pendientes solo tenemos que confirmar que la visa y pasaportes están vigentes y alistar las maletas. ¿Igual no encontraste nada raro en esto?

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

Por un breve momento imagino la charla ganada ¡Pero no! Su camarada volvía a traer el caso nuevamente a la mesa ─ ¡No, basta! Habíamos quedado que eso quedaba enterrado y no se hablaba más de ello, Gabriel ─ comentó mientras caminaba por el lugar haciendo que acomodaba cosas en su vicio de mantener todo limpio y en orden, al menos en su lugar de trabajo. Sino después no encontraba nada.

Por suerte la viejita vino a salvarlos de una pelea de egos. Aunque el tema tampoco era de los mejores, aún podía recordar el orín de gato por toda la casa mientras la señora, como si nada, cocinando su guiso ¡Puaj! ─ Hay estudios que indican que uno se acostumbra a los olores con los que convive por más de quince minutos. Tal y como pasa cuando vamos al baño ─ sonrió ya que compartían el baño laboral ─ Por eso hay desodorante ambiental, para usarlo ─ aprovecho a molestarlo como recordando un reclamo pendiente que tenía guardado como un as bajo la manga.

Ya en el camino ─ Claro, te maltrato para compensar estás horas laborales donde no te demostré lo mucho que te amo ─ respondió como si fuera un niño aplicado, aunque en realidad lo era ─ ¡Olvídate de los permisos! Es gratis aunque… es bueno sacar los permisos así esa plata termina como un adicional en nuestros bolsillos… ¿Dónde me dijiste que quedaba el lugar? ─ consultó una vez más mientras la codicia lo embargaba, lo mismo que los chistes ─ Si la soplas, crece. Es mágica ─ continuo sin poder charlar seriamente dos palabras con Gabriel sin caer en una de sus jodas.

Una vez en la cafetería se pidió un café doble y una donut tostada, rellena con jamón, queso y tomate para disponer del tiempo y leer con calma, su compañero estaba muy tranquilo ─ ¿Todo bien, colega? ¿Aún piensas en la flauta? ─ consultó con su mejor rostro serio e indagatorio y al ver qué le respondía asintió ─ Perfecto, no sé cuándo nos den fecha de viaje, mí valija está lista en media hora ─ y la pregunta siguiente lo hizo dudar ─ ¿Raro? ¿Raro como qué?... ─

Alexander Kane || Cuartel General || Por la mañana

Cuando lo daban por muerto, el cómo los perros se levantaban para seguir la guerra, no daba tregua sin cuartel alguno, claro que no señor, de lo contrario su reputación se iría totalmente por los suelos, y nadie le iba a ganar tan fácilmente, ni siquiera Alexander lo haría. Porque Gabriel tenía siempre una carta bajo la manga.

Nunca dijimos eso, dije que no era seguro que lo recordase y lo sacase a colación. -Dijo con cierto toque de burla en su voz, era claro que no prometía cosas porque luego se le hacía complicado tener que cumplirlas como era debido.

La viejita no era la mejor cosa, solo de pensar que esa mujer podía dormir entre tanto orín de animal, creía que más bien esta ya no tenía sentido del olfato por eso ni se preocupaba de cómo es que ella misma estaba oliendo, por mucho que tratara de la manera más políticamente amable posible decirle que cargaba peste peor que basurero, con tanto gato que seguía reproduciéndose en esa casa, pero lo misterioso era de donde sacaba los fondos para comprar toda esa comida de los animales.

Yo creo que si llevamos a esa mujer a una de las investigaciones y la huele un muerto este va a salir corriendo más pronto que tarde, ni siquiera nos esforzaríamos mucho en los exorcismos con eso. Pero temo que tendríamos que cargar con los mil gatos. -No quería seguir pensando en esos aromas, encontraría el modo nuevamente de vengarse de este por eso.

Como si fuera posible que alguien pudiera extrañarte del todo, eres como esos moquillos que no salen de la nariz por más que se limpie, -Y si ambos tenían ese modo de molestarse tan particular.  No podía afirmar que pasaba por la otra cabeza salvo que si no podían salir del país por muchos gastos pagados que les dieran daba lo mismo si los devolvían en el mismo aeropuerto, era como la lógica de todo.

En algún lado de Europa, creo que, en Londres, sé que anote la dirección, cuando volvamos mirare de nuevo. Prefiero no tocarla ahora, pero si te va el concierto en privado con gusto te doy uno. -Que como les encantaba joderse el uno al otro con estas conversaciones sin sentido. Podía decir que realmente no tenía tanta hambre, más el cuerpo humano no solo vive del aire. -No, no en eso, sino en que, creo que no es normal que nos llamen del otro lado del mundo solo por un caso. ¿Qué no cuentan con exorcistas por allá como para llevarnos? Hasta tienen sus programas también.

Y si sonaba como a poco que le agradaba que comparasen programas sobre que era real o que era fingido, muchos si lo hacían solo por el reconocimiento o fama sin la menor idea de cómo lidiar con lo sobrenatural.-Temo que necesitamos llevar el equipo pesado, es tan solo que ese presentimiento de que no es un caso normal no se me va de la cabeza. -Con tal preocupación se tomo el café sin ponerle azúcar sintiendo lo cargado que estaba.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

- Está bien, mira ¡has ganado! ¿Ya estás conforme o quieres un certificado o similar? ¿listo? - terminó de responder de la misma forma infantil que siempre hacía dando a entender que no quería ganar esa discusión aunque en realidad era porque le pesaba seguir hablando de lo mismo una y otra vez. Conocía lo suficiente a su amigo como para saber que era imposible no cansarse discutiendo con él.

Y luego continuaron hablando de la viejita con perfume natural de gato - Mi teoría es que los fantasmas no huelen, es mas bien la energía de los inciensos lo que los repele de las casa y no tanto el aroma de estos - confesó mientras caminaban a la par y con total certeza del asunto - De todas formas no tengo ningún interés en que seamos tres los que estudiemos cosas paranormales. Nosotros dos es suficiente ¿te imaginas viajando con el olor de orín de gato por horas? ¡Olvidalo! - declaró con espanto - Y si, ya sé que me amas tanto como a esos mocos que acumulas en la nariz, pero creeme que me levanto cada dia deseando ser ese moquillo que se pega bien a la pared de la nariz, tanto que cuesta sacarlo o sale con algún que otro pelito incorporado. Bueno, ese me gustaría ser, para que siempre me recuerdes - el placer con aquel comentarios se podía notar en la mirada de Alexander que hasta soltó un gemido tras el comentario y continuó con las expresiones durante un tiempo hasta que alcanzaron la comida, porque la comida era muy importante para él y no era broma.

- Ok, después pásame la dirección asi consulto a ver si nos hacen precio y de paso inflan un poco mas la factura y dividimos la ganancia - guiñó un ojo porque si podían sacar una tajada mas grande de la torta era mucho mejor el trabajo - Por supuesto, podemos hacer una competencia privada y de paso el que gana invita la cena - duplicó la apuesta para ver quien era mejor, aunque claro, con ellos siempre era todo chistes fálicos o similares. No maduraban.
- ¿Les preguntaste eso? ¿Si tenían referencias nuestras o quién les pasó nuestro contacto? - consultó renovando la intriga, era cierto que habían tenido casos relevantes pero no sabía que habían llegado tan lejos con sus proezas - Puede que les guste nuestro estilo… somos profesionales pero tenemos ese “no se qué” - se excusó imaginando que era eso lo que los dejaba mejor parados frente a otros - Igual no pasa nada, podemos hacer unas cuantas llamadas y ver qué pasa con el caso antes de dar el sí definitivo - tampoco iban a hacer semejante viaje por algo que podía comprometerlos a futuro o arruinara su reputación y se notaba que Gabriel pensaba lo mismo.

Alexander Kane || Cuartel General || Por la mañana

Uno bien enmarcado no estaría para nada mal. –Aunque era claro que cuando se sumían en ese tema darían las mismas vueltas sin sentido hasta que se cansaban completamente de ello o se les olvidaba hasta que alguno de los dos nuevamente se acordaba de eso, no por menos era que por eso lo evadían, y ni se acordaba realmente como es que había salido a colación, pero bueno era mejor dejarlo por ahora o se iban a terminar peleando y ni uno ni el otro estarían hablando de aquel importante trabajo que tendrían si optaban por aceptarlo del todo.

Considero que incluso debe haber muchas cosas que si los repelen si bien no es el perfume si son los inciensos con ciertos aromas especiales que cada uno de ellos usa, es normal que tengamos la idea de que puede ser mejor, especialmente con los espíritus que pueden contar como más violentos, pero no quiero realmente adelantarme del todo a los hechos.

Así eran realmente a veces decían cada cosa que bien podría espantar a más de una persona, no solo porque realmente fuera inapropiada, sino que daba cierto morbo o era el humor de ambos el que hiciera que fueran de ese modo. –Creo que si otros escucharan esto sentirían tantas cosas a la vez que no sé por dónde comenzarían de verdad a pensar si correr, llorar o tirarte algo por traumar a los niños. –Comento mientras llegaban al puesto de comida, igualmente porque si tenía hambre, sino no estaría ahí sentado esperando.

Si los gastos tenemos que verlos, porque es un caso realmente complicado de asimilar, y no solo con eso, sino que todo el equipo extra que vamos a documentar y que tiene que ir modo que no lo azoten como es común en los aviones, si entiendo que nos pagarían gastos, pero justo por eso no quisiera sospechar de la gente y sin embargo lo hago.

No suena a una mala idea si quiero algo de comida gratis, creo que es una buena idea si es que gano, aunque tengo confianza en mí mismo de que eso haré. –Dijo altamente seguro, aunque eran bromistas también eran algo competitivos entre sí mismos.

Algo así, también me comentaron que fue en base a que habían escuchado de nuestros casos, y que alguien conocido les mando unos cuantos videos nuestros investigando sitios malditos, bueno ya sabes malditos en qué sentido, no creo que sea algo fuera de lo normal que alguien nos conozca más allá del charco, aunque suene extraño y casi imposible.

Por eso mismo tenía que contarte, no quería darle una respuesta antes de que todo el equipo en general de sus puntos de vista, claro porque además es un caso que suena complicado, no porque lo vea siempre así, sino que algo en mi sexto sentido lo dice. –De por sí, las veces que paso por alto esas señales le fue mal, por eso era más cauto ahora con esas cosas. –Bueno ahora dime como haremos la apuesta.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana

- Perfecto, dalo por hecho. No me cuesta. Mi abuelita tiene un marco ornamentado que le iría perfecto - respondió con una falsa altanería. Si bien trabajando eran buenos y profesionales, si sus clientes los vieran relacionándose perderían credibilidad ya que se seguían tratando como en la escuela. Si fuera por Alexander, nunca dejaría de ser un niño.

- Eso es cierto - coincidió con los ojos entornados mientras recordaba algunos casos donde lo puso a prueba - Posiblemente el aroma si los llame, en caso de ser alguno familiar estando vivos. Incluso puede que sean un punto de anclaje a este plano - explicó como una posibilidad. Si se trataba de hacer conjeturas, podía ser todo un experto, pero luego había que someter todo a prueba o no servía de nada. Coincidía con no adelantarse a los hechos, no podían dar nada por asegurado hasta no probar.

Entornó su cabeza escuchándolo atentamente mientras caminaban hacia el local. Se tomó unos segundos para pensar una buena respuesta a su comentario - Bueno, pero nadie los invitó para que se metan en nuestra conversación… Es algo personal entre nosotros dos. Si nos gusta hablar de necrofilia y asesinatos, o compartirnos fotos de ello, no es problema de ellos porque tampoco le hacemos mal a nadie con nuestros gustos ¿Cierto? -  habló en un tono un poco mas fuerte de lo normal, enfatizando “necrofilia” y “asesinato” al apostarse al lado de una pareja que estaba pensando qué pedir para comer, mientras ellos tomaban asiento. Al ver que giraba el rostro se mostró lo mas serio que pudo, evitando reírse como un desquiciado.

- No confío en las aerolíneas, Gabriel. Olvídalo… no dejaré mis gafas técnicas en sus manos. Pienso llevarlas conmigo en el equipaje de mano, porque si llegan a desestabilizarse aunque sea un poco, me pasaré todo el día reclamando hasta que me paguen por los daños - aseguró marcándolo con un dedo dictatorial en la mesa. Era un rotundo no, esas gafas las llevaría consigo aunque tuviera que viajar en bodega. Tras esto, levantó la vista del menú y le apretó la mano aceptando la competencia sin decir una palabra mas. Estaba seguro que ganaría.

- Somos muy buenos, amigo mío. Es eso… - se le escapó una sonrisa, que su trabajo llegara del otro lado de su mundo, era un gran reconocimiento a su empeño y constancia - ¡Imagínalo como un nuevo desafío! - animó a su amigo que parecía tener reticencias a aceptar el caso sin su aprobación, aunque confiaba en ese sexto sentido que decía, por lo que suponía tendrían que poner mas de su experiencia para resolverlo.
- Se nota que te gusta la competencia. Hagamos esto… tu pones las condiciones ¿está bien? Así luego no vienes llorando - bromeó mientras se levantaba y tras consultarle lo que pediría iba al mostrador a hacer el pedido o su cuerpo empezaría a consumirse a sí mismo.

Alexander Kane || Cuartel General || Por la mañana

Nada como una reliquia de la abuela para tener en el cuadro de la sala donde antes estaba otra cosa y tapar la mancha de donde no se ve tan sucio. –Replico con el mismo sarcasmo que el otro, no es que no fueran profesionales cuando era necesario, pero normalmente eso era dentro del trabajo, y a veces dentro, solo no podían contener la idea de dejar de molestar al otro, era como ya hasta normal, otros solo rodaban los ojos acostumbrados a sus cosas.

Sabemos por lo que hemos encontrado que algunos de ellos tienen esos famosos asuntos o solo no han querido aceptar que tienen que trascender como todo en esta vida, no podemos culparlos de eso, de hecho, creo que están confundidos de porque están en el plano, si ya muriendo, o están protegiendo a sus familias, tengo entendido que a veces solo es para visitarlos o esperar que las familias los dejen ir para ya descansar en paz. –Dijo ya que se habían topado con varias formas espirituales en sus carreras.

Mientras caminaban al local iba pensando en todos esos puntos de vista, era normal que tuviera sus reservas en cuanto a lo que estaban pidiendo para poder tomar el caso, también porque era un viaje técnicamente al otro lado del mundo es que no se podían permitir sobre todo darse paso a los errores. –Pues no, pero la gente por normalidad tiende a estar pendiente de que hacen otras personas en lugar de preocuparse por sus asuntos, no me sorprende que no estemos siendo escuchados por gente chismosa, en fin, que tampoco es que me afecte, si quieren estarse metiendo, poco pueden hacer.

Bien solo digo que no se, creo que ellos tienen una clase de avión privado, no recuerdo si anote eso, sino pediremos ir en primera clase al llevar equipo especial y delicado que no podemos mandar vía equipaje normal, odio cuando solo lanzan las maletas al suelo en el modo más descuidado posible.

Por mientras el trato estaba sellado y con la otra mano miraba el menú, a sus lados, la pareja parecía pensar que eran locos de verdad, murmurando entre ellos, algo que no le importaba o molestaba, podía ser peor si lo provocaban. –Tienes razón, no creo que seamos tan malos como para digan que nos contrataron por lástima. –Era claro que sus videos llegaban a varias partes del mundo.

Esta perfecto por mí, entonces pondremos los términos en papel y como siempre los firmaremos para que cualquier cosa, lo tenemos escrito. –Esos usualmente terminaban en un cajón de todas las estupideces que hacían a lo largo de los años, pero que importaba, era divertido y punto.

Sin más le paso su orden y espero que volviera del mostrador, aún pensaba en el caso y de vez en cuando miraba a la pareja, estos se veían listos para correr en cualquier momento, podría molestarlos una vez que Alexander trajera la comida.

Gabriel con Alexander||Cuartel general || por la mañana